¿Por qué baja el nivel de anticongelante de un coche?
- noviembre 24, 2021
- Recambios originales
Para lograr un buen mantenimiento, es fundamental anticiparte a los problemas para evitar averías más graves y lograr alargar la vida del vehículo. Una de las tareas sencillas para conseguirlo es mediante el control del nivel de anticongelante. Te contamos cómo.
El líquido refrigerante o anticongelante
En el interior de un motor en funcionamiento se producen múltiples rozamientos y fricciones: entre el pistón y el cilindro, entre el cigüeñal y los apoyos sobre los que gira, etc. Como consecuencia se produce un aumento de la temperatura, se desgastan los diferentes elementos y el rendimiento del motor puede verse reducido.
Aquí es donde entra en juego el sistema de refrigeración, cuyo buen funcionamiento es clave para evitar la aparición de averías graves o incluso la rotura completa del propulsor.
El sistema de refrigeración es un circuito cerrado por el que circula el líquido anticongelante, también conocido como líquido refrigerante. Está formado por el vaso de expansión, el radiador de motor, la bomba de agua (que en el caso de vehículos híbridos es eléctrica), el termostato y las sondas de temperatura. Su objetivo es mantener el motor a una temperatura de funcionamiento óptima, que suele situarse alrededor de los 90ºC.
Qué hacer ante una bajada del nivel de refrigerante
Es normal que con el tiempo se produzca una bajada moderada del nivel del anticongelante. El mismo funcionamiento del sistema de refrigeración genera subidas y bajadas de temperatura que provocan un cierto nivel de evaporación del líquido refrigerante. Así que tener que rellenar con alrededor de 250 ml en cada operación de mantenimiento entra dentro de lo esperable y no es síntoma de que exista ningún problema.
Por encima de estos niveles de pérdida y cuando el cuadro de instrumentos active la alerta de nivel de refrigerante bajo es recomendable inspeccionar el circuito para encontrar posibles fugas:
- Reponer el líquido refrigerante hasta el nivel que recomienda el fabricante y observar si aparece alguna pérdida. Puede hacerse de manera visual, y en los talleres lo realizarán a través de la máquina de diagnóstico.
- Después de rellenarlo monitoriza el nivel durante un tiempo para confirmar si existen una pérdidas.
Dónde buscar las fugas de líquido refrigerante
Las pérdidas de líquido anticongelante no siempre son fáciles de diagnosticar. Pueden producirse en lugares de difícil acceso y dejar el refrigerante depositado en algún rincón que nos sea difícil comprobar.
Uno de estos lugares trampa a los que hay que prestar especial atención es la bomba de agua, ya que en la mayoría de motores va montada y movida por la correa de distribución y las posibles pérdidas de anticongelante pueden pasar desapercibidas si no son muy abundantes.
Otra zona crítica es el radiador de calefacción que se aloja en el mueble de climatización y puede llegar a manchar la moqueta del interior de habitáculo antes de que el usuario se dé cuenta de que existe un problema.
Posibles causas de la pérdida de anticongelante
Como hemos visto, cualquier manguito o material puede tener un pequeño poro o fisura que con el tiempo acaben provocando una bajada del nivel de refrigerante.
Pero si las pérdidas de anticongelante se repiten a lo largo del tiempo, incluso después de haber efectuado varias reparaciones, habrá que ponerse en lo peor. Tal vez estemos ante una avería en la junta de la culata que provoca problemas de presión en todo el circuito de refrigeración.
Otra posibilidad es que esté entrando anticongelante dentro de uno o varios cilindros. Para comprobarlo, habría que analizar si existen restos de hidrocarburos en el líquido refrigerante. De ser así, lo más probable es que haya que extraer la culata para sustituir la junta.
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